Hace unos días le comenté a alguien que yo me consideraba exitoso en mi vida; que había logrado lo que me había propuesto; que tenía lo que quería...
Creo que el éxito no es el simple resultado de la consecución de objetivos medibles, resultados, datos duros, sino el estado permanente de felicidad, tranquilidad, amor, alegrías que he construido en parte a los logros, pero también en parte a las relaciones personales que podido cultivar.
Probablemente podría decir que soy exitoso aún cuando no haya conseguido las mismas cosas que ahora pero siempre cuando tenga a mi familia, a mis amigos, a buenos compañeros, mis actividades, mis ganas de seguir adelante de crecer, de cambiar, de mejorar..
El éxito no es el sueldo, ni los bienes materiales, el éxito es el más honesto estado de conformidad con lo que tienes y lo que das.